viernes, 11 de diciembre de 2009

El culto guadalupano: Un ejemplo

El culto guadalupano es un ejemplo que los cristianos debemos tener de cómo NO evangelizar; quienes conocemos la verdad sabemos que la aparición de la Virgen del Tepeyac es una representación que la iglesia católica española utilizo para que los indígenas del recién conquistado continente dejaran sus creencias y se convirtieran a su doctrina, quizás los sacerdotes de aquellos días hayan estado sinceramente convencidos de que lo que hacían era lo mejor, aunque en realidad todo se redujo a la célebre premisa maquiavélica de “El fin justifica los medios”, el resultado confirmo que no fue lo correcto.

La comunidad cristiana no tiene vírgenes ni santos para llevar a cabo estas prácticas, pero si hay doctrinas predominantes en cada denominación, algunos se enfocan en el bautismo, otros en el arrebatamiento del espíritu santo, otros se enfocan en la uncion, y así existen muchos ejemplos de cómo las iglesias cristianas se basan de simbolismos o dogmas para evangelizar, con esto no estoy diciendo que esté en contra de estos preceptos, sin embargo no debemos enfocarnos en ellos como si fueran nuestras “doctrinas patronas”, porque de esa manera vivimos un culto que se asemeja a aquello por lo que Martin Lutero tanto lucho en la reforma.

Con tristeza veo como cada 12 de diciembre miles, sino millones de gentes llevan a cabo rituales estériles, donde nadie sabe a ciencia cierta lo que hace ni porque es tan grandioso el hecho de que una imagen se “apareciera” para pedir que edifique una basílica, pues así muchos cristianos viven una religiosidad estéril donde creen que sus doctrinas son la clave de su salvación.

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